En esta quinta y última lección repasaremos el pulmón. Ahora se entiende mejor la importancia de la lectura sistemática. Es fácil olvidar alguna de las estructuras de las lecciones anteriores cuando el paciente tenga algo en el pulmón (cosa que no ocurrirá siguiendo la lectura sistemática).
De los hilios salen las líneas que corresponden a los vasos. Son más finas conforme nos alejemos del hilio y son bilaterales. La distribución debe ser similar, homogénea. Debemos ver cómo la densidad de ambos parénquimas es similar ya que asimetrías indicarían patología pulmonar.
Cuando el vaso cambie de trayecto lo podemos ver como un punto. Esto es bastante habitual cerca de los hilios donde podemos ver puntos que corresponden al cambio de dirección de los vasos y no corresponder a nódulos (en esta imagen puedes ver algunos vasos que simulan nódulos).
Hay que seguir los vasos hasta las regiones periféricas para que no se nos pase un neumotórax.
También tenemos que ver los ángulos costofrénicos laterales y posteriores que deben estar libres.
En la proyección lateral tenemos que ver dos zonas mas aireadas y por tanto hipodensas, una detrás del esternón y otra posterior superpuesta a la columna dorsal baja, en ambos casos debido al aire pulmonar normal que se localiza en dichas áreas. Si la zona retroesternal no está hipodensa sugiere masa mediastínica anterior y repasaremos las líneas mediastínicas en la proyección posteroanterior. Si la zona posteroinferior tampoco está más aireada que la superior sugiere patología en esta zona.
En esta imagen se puede ver la zona retroesternal más aireada y por tanto más hipodensa (señalada con A) y la diferencia de densidades entre la región posterior superior (B) y la inferior (C). La zona inferior está más aireada y será más hipodensa (negra).
También hay que buscar las cisuras; en condiciones normales se ven como líneas muy finas en sus teóricas localizaciones. Para que sean visibles en la radiografía su trayecto debe ser paralelo a los rayos X y si es un poco oblicuo no las veremos. Habitualmente, en la proyección posteroanterior, se suele identificar únicamente la cisura horizontal o menor en el lado derecho y ninguna en el hemitórax izquierdo. En la proyección lateral, en teoría, podríamos ver las tres cisuras pero no siempre ocurre o no vemos todo su trayecto. En las siguientes imágenes puedes ver la cisura menor (en negro) en la proyección posteroanterior y lateral, la cisura mayor derecha (en rojo) y la izquierda (en verde) en la proyección lateral. Sabemos cuál es la cisura mayor derecha y la izquierda porque en este caso podemos ver cómo una de las cisuras se fusiona con la cisura menor y por tanto será la cisura derecha. Y la otra, obviamente, la izquierda. Esto ocurre pocas veces.
Si quieres ver un caso relacionado con las cisuras pincha AQUÍ.
Problemas:
Las bases son más densas en la proyección posteroanterior pero no se ve nada patológico en la lateral. Suele ser por el aumento de densidad producido por las mamas en las mujeres.
Con esto ya sabríamos interpretar una radiografía de tórax normal. Ya podemos empezar con las alteraciones radiológicas. ¡ANIMO!