Este paciente tiene una colección hiperdensa (1) con forma de semiluna. Se trata de un hematoma subdural agudo. Cuando las colecciones, sean hemáticas o no, se sitúan debajo de la duramadre, adoptan forma de semiluna por lo que son fácilmente distinguibles de las colecciones epidurales que tienen forma biconvexa. Esto se debe a las fibras de unión y la capacidad de distender estos espacios. Tiene un importante efecto de masa con desplazamiento del tercer ventrículo (flecha) y del ventrículo homolateral que está colapsado (3). En cambio, el otro ventrículo está dilatado por la imposibilidad de drenar (2).
Además, este paciente tenía una válvula de derivación pero en estas imágenes solo vemos el trayecto subcutáneo (4). En otras imágenes más craneales podríamos ver cómo la válvula llega hasta los ventrículos.
Este paciente debe ser intervenido rápidamente para evacuar la colección.
Los hematomas subdurales suelen verse tras traumatismos en ocasiones muy banales, especialmente en pacientes de edad avanzada que incluso no recuerdan el golpe. Pueden dar clínica al instante, horas o días después del traumatismo.